Cuando llega un nuevo miembro a la familia suele surgir la duda entre los padres sobre crear una nueva habitación para el recién llegado o apostar por habitaciones compartidas. Esta última opción suele ser la elegida cuando no se dispone del espacio suficiente en el hogar y ya hay un niño en la familia.
Entonces es cuando se necesitan soluciones, no solo para la distribución de los muebles, sino también para la decoración, ya que quizá los hermanos no sean del mismo género, o tengan edades muy diferentes. ¿Qué hacer para que los dos se sientan cómodos en su nueva habitación? Aquí os dejamos algunas ideas que seguro te vendrán bien para decorar dormitorios juveniles.
Aspectos a tener en cuenta en un dormitorio juvenil compartido
Lo más importante es tomar bien las medidas y saber el espacio que tenemos para los muebles principales, que son las camas y el armario. La distribución de estos elementos va a influir en el resultado final de la habitación, por eso hay que elegir muy bien los muebles. Un consejo: intenta no combinar más de tres materiales distintos, si puede ser elige el mismo material para todos los muebles y si la habitación es pequeña opta por muebles con patas y volados.
El objetivo de una buena distribución es que los dos niños se sientan a gusto en su habitación, por tanto hay que colocar elementos que sean de su agrado. Se pueden crear dos ambientes distintos en el cuarto pintando cada pared de un color con el que se identifique cada niño, colocando separadores, decorando con elementos diferentes y, si el espacio lo permite, instalando muebles diferentes.
Otro aspecto importante es el almacenaje. Con dos niños en una habitación la necesidad de guardar libros, juguetes y ropa se multiplica, por tanto, hay que elegir estanterías, cajoneras, bancos y puffs con gran capacidad de almacenar cosas para que puedan recoger su cuarto sin ningún problema. El cabecero de la cama también puede servir para guardar. Además, puedes instalar colgadores para almacenar en las alturas y baldas para depositar los objetos que más utilicen a diario.
Cómo legir las camas
El espacio disponible será el que determine qué tipo de cama vas a instalar en una habitación compartida. Si tienes mucho espacio lo mejor es que elijas dos camas individuales. Si, por el contrario, la habitación es reducida, los dormitorios juveniles con literas es una opción que suele gustar mucho a los niños. También están las camas nido o las camas abatibles para que durante el día los niños tengan más espacio en el cuarto.
Cómo legir los armarios
Al igual que las camas, si dispones de espacio, lo mejor es que cada niño tenga su propio armario, pero, si no es posible, pueden compartir uno que tenga bastante capacidad de almacenaje y que sea funcional y duradero. Hay que elegir bien las puertas de los armarios si la habitación es pequeña. Lo más aconsejable es optar por las puertas correderas en vez de las abatibles, ya que así no habrá problemas de espacio cuando se abren.
Escritorios
Se puede instalar un escritorio amplio para que puedan estudiar los dos niños a la vez o también delimitar dos zonas de estudio diferentes para cada niño, siempre intentando que reciban una buena iluminación natural o que dispongan de flexos que les permitan estudiar sin esfuerzo. También puedes usar lámparas de pie en lugar de las de techo para crear un ambiente más agradable. Además, deberá tener cajones o baldas para guardar todo el material escolar que necesitan.
Cómo decorar una habitación compartida
Si apuestas por crear un ambiente diferente para cada niño, intenta que ambos sean complementarios y no radicalmente diferentes, de esta forma se podrán decorar por separado pero compartiendo el mismo espacio.
Puedes apostar por pintar las paredes de colores diferentes o con el mismo color pero con decoración personalizada para cada niño, instalando vinilos, pósters de sus personajes favoritos, cuadros, etc. Si los niños ya tienen capacidad de elegir lo que más les gusta no dudes en preguntar, así se sentirán partícipes de la decoración de su cuarto.
En caso de que la habitación sea pequeña elige colores claros y muebles idénticos o muy parecidos, de esta manera visualmente el espacio parecerá más amplio. Si los niños ya son adolescentes una buena opción sería utilizar separadores de espacios para que tengan mayor intimidad.
Los colores neutros en las paredes pueden ser una buena manera de empezar a decorar la habitación y después seleccionar colores o estampados más atrevidos en cortinas, cojines, edredones o alfombras, así cada niño tendrá algún elemento personalizado que haya elegido él mismo.
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